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Hace ya muchos años, cuando al frente de la Cofradía estuvieron dos personalidades tan rotundas y sensibles como don Inocente Fe Jiménez y don Antonio Alcalá Venceslada, tuvieron la feliz idea de promover una serie de publicaciones nazarenas en las que la riqueza y oportunidad del contenido se aunaba con un cuidado diseño e impresión, lo que hizo que hoy esas publicaciones sean auténticas joyas bibliográficas.

La celebración del 425 Aniversario de nuestra Cofradía ha actualizado entre nosotros aquella feliz iniciativa y nos ha impulsado a dar a la luz un hermoso y perenne recuerdo de esta celebración, editando las publicaciones que hoy presentamos compuestas por la reproducción facsímil de varios impresos nazarenos, venerables por su antigüedad y sugerentes por su rareza y su interés bibliográfico.

La primera de dicha publicaciones es la reproducción del librito original del cronista don Alfredo Cazabán Laguna titulado NUESTRO PADRE JESÚS DE LOS DESCALZOS. APUNTES HISTÓRICO-RELIGIOSOS.

El insigne periodista, historiador y Cronista Oficial de la Provincia don Alfredo Cazabán Laguna, a sugerencia e iniciativa de los hermanos del Nido Segalerva, editores y financieros del periódico jaenés LA UNIÓN y fieles devotos y cofrades de Nuestro Padre Jesús Nazareno, escribió allá por 1902 una serie de artículos periodísticos que se presentaban como una síntesis de la historia de la Cofradía, elaborada a partir de una interesante documentación hoy por desgracia desaparecida. Aquellos artículos tuvieron calurosa acogida, pero como suele ocurrir, la propia levedad de las páginas del periódico donde se publicaron los convirtieron pronto en un documento efímero.

Cuando don Inocente Fe Jiménez se hizo cargo del gobierno de la Cofradía en 1924, rescató de sus carpetas los recortes de aquellos artículos y encomendó al cronista Cazabán su revisión y ordenación con el fin de reunirlos en una monografía que habría de editar la Cofradía. Y a tal efecto, consiguió de la Excma. Diputación Provincial una generosa subvención para ello.

Sin embargo el destino malogró en su inicio aquel proyecto. El cronista Cazabán fallecía en los albores de 1931. Unos meses después, caía la monarquía de don Alfonso XIII y en un gesto carente de sensatez y falto de elegancia, los nuevos dirigentes de la Diputación acordaron retirar a la Cofradía la ya aprobada subvención, haciendo peligrar la edición de tan ansiado librito.

Mas como don Inocente Fe era hombre al que no arredraban las dificultades, encomendó la ordenación de aquellos artículos a don Antonio Alcalá Venceslada para editarlos en homenaje al cronista desaparecido, buscó entre sus amistades algún excelente ilustrador y encomendó a un impresor de su confianza -el maestro Diego Cobo que tenía sus imprenta en la calle Teniente Bago- la edición, que se hizo realidad  con la anónima advertencia de “Costeada por un devoto”.

La tirada fue de mil ejemplares. Pero los conflictos de aquellos años turbulentos y la inminencia de la guerra civil malograron su difusión, lo que ha hecho de este libro una auténtica rareza. Aumentada por el hecho de que los documentos sobre los que se escribió se han perdido.

Creemos, pues, que estaba mas que justificado su rescate y divulgación para que su lectura nos ayude a centrar este 425 aniversario en sus coordenadas históricas y ambientales.

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Por otro lado, dado que entre las prácticas de la religiosidad popular de Jaén la NOVENA A JESÚS NAZARENO constituye, sin duda, un acontecimiento de dilatada trayectoria histórica y perenne actualización, hemos querido reunir en un cuidado volumen los dos ejemplares mas significativos de su entrañable ritual.

La primera edición conocida, hecha en 1826 por los Padres Carmelitas Descalzos e impresa en la imprenta de Manuel María Doblas y de la que luego serían reflejo las muchas ediciones que de esta novena se han hecho y la actualización y renovación que en 1861 preparó meticulosamente el canónigo lectoral de la Catedral y a su vez Gobernador de la Cofradía en los años de 1873-1876 don Manuel Muñoz Garnica y que fue impresa en los talleres de don Francisco López Vizcaíno.

Ambas novenas contiene una curiosa introducción histórica sobre los orígenes de la imagen y su Cofradía, las oraciones y ritual propio del ejercicio diario de la novena y las evocadoras “coplas” o “gozos” a Jesús Nazareno que son inseparables de este popular culto y que los cofrades jaeneros aprendimos a tararear desde nuestra niñez.

Los libritos de estas dos ediciones de la novena han sido muy habituales en muchos hogares de Jaén, pues las familias aparte de utilizarlos para seguir piadosamente la Novena, los han utilizado para que en casos de obligada ausencia, enfermedad o imposibilidad laboral o física, se pudiese hacer privadamente la Novena en el silencio hogareño ante una estampa de Jesús Nazareno.

La cuidada reproducción facsímil de ambas novenas, hoy muy difíciles de encontrar, creemos va a permitir que los devotos de Nuestro Padre Jesús puedan acariciar en su manos este entrañable devocionario que sin duda tuvieron en gran estima nuestro abuelos y los padres de nuestros abuelos.

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Igualmente, hemos querido reunir en un opúsculo tres bellísimos y evocadores papeles nazarenos sumamente desconocidos para el común de las gentes.

El primero es el hermoso díptico que en se recogió en 1926 la partitura y letra de las “saetas” populares que en Jaén se cantaban en el siglo XIX a Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores. Un tipo de “saeta” diferente a la “saeta” aflamencada que luego nos vino desde Sevilla y que mejor podrían considerarse “cantos de Pasión”.

La labor conjunta del maestro de capilla de la Catedral don Cándido Milagro y el buen hacer del cronista don Alfredo Cazabán Laguna consiguieron perpetuar en este díptico tan singular pieza musical salvándola del olvido e incorporándola definitivamente en el patrimonio musical de la Cofradía.

Se ha añadido además, otro díptico no menos bello, editado en 1928, que recoge el soneto que a don Antonio Alcalá Venceslada le inspiró el paso Nuestro Padre Jesús por vez primera bajo el Arco de San Lorenzo, una vez que la Cofradía consiguió del alcalde don Fermín Palma que se rebajara sensiblemente el nivel de la calzada para permitir que el trono de Jesús pudiese transitar por tan significativo lugar. Soneto complementado con unas saetas escritas por don Alfredo Cazabán, una evocadora fotografía de Alfonso Pez recogiendo aquel singular momento y unos polícromos dibujos de Jesús López inspirados en la decoración mudéjar de la capilla del Arco. Todo ello delicadamente impreso en Madrid en los talleres de Gráficas Españolas.

Y por último se ha complementado este volumen con el evocador romance El Prodigio, crónica en verso en la que don Antonio Alcalá Venceslada narró el fenómeno sociológico que supuso la suspensión de la procesión el Viernes Santo de 1928 por causa de la lluvia y la agitación popular que obligó a celebrar la procesión en la insólita madrugada del “Sábado Santo”. Un singular opúsculo ilustrado con fotografías de rincones de la ciudad y sugerentes dibujos realizados al efecto por el pintor José Nogué y el miniaturista Jesús López, todo ello impreso en 1929 con esmerado diseño por la Imprenta Morales.

Son en conjunto tres hermosos “papeles nazarenos”, engalanados con unas gratas ilustraciones que a partir de ahora van a tener la merecida divulgación.

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 Complemento de estas publicaciones facsímiles es también una carpeta en la que hemos recogido, debidamente comentadas y anotadas, una serie de estampas que nos acercan la familiar imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, tal como se la ha visto en los ambientes artísticos desde el siglo XVIII a nuestros días. Estampas algunas de especial rareza e interés iconográfico, con las que sin duda se inicia un álbum que quizás pudiera incrementarse en años posteriores.

Todas estas publicaciones, en edición de bibliófilo numerada y certificada, van reunidas en un adecuado contenedor de elegante diseño, para permitir su ordenación y conservación.

La exacta reproducción facsímil de los originales, va antecedida y complementada en cada caso con la debida introducción histórica y comentarios realizados por el Cronista de la Cofradía, lo que permite acercarnos con conocimiento de causa a cada una de las publicaciones.

La idea inicial de este hermoso recuerdo del 425 Aniversario, una vez pergeñada en el seno de la comisión correspondiente, ha sido acertadamente hecha realidad en los talleres de “Imprenta Blanca”, cuyos titulares Vicente y Jose Blanca han volcado en ella no solo su reconocida y ejemplar competencia profesional, sino su permanente cariño e interés por cuanto se refiere a Jaén y de manera especial al mundo cofrade.

Entendemos que en el mundo cofrade, el patrimonio bibliográfico y documental debe ocupar un lugar preferente, pues en ese patrimonio reside la memoria colectiva de la hermandad, la memoria que nos permite saber y entender de donde venimos y a donde vamos. Es necesario que las celebraciones y conmemoraciones cofrades no se queden solo en actos puntuales, que en su propia esencia a veces son efímeros y acaban por diluirse en la niebla del tiempo y el olvido. Complementar esas celebraciones conmemorativas con iniciativas en las que la letra impresa otorgue la necesaria perennidad, es algo que no debemos perder de vista.

Ese es el propósito que a nosotros nos ha guiado al procurar que la celebración jubilosa de nuestro 425 Aniversario deje en nuestras casas y en los anaqueles de los archivos y bibliotecas el perenne recuerdo de estos facsímiles con los que, no lo dudemos, podremos acercarnos mas íntimamente a las esencias de nuestra Cofradía, actualizando los mejores recuerdos de su ayer.